Hace un año , escribía esta carta para una amiga en México a la que no conocía todavía, Karim de Perro se fué
Sé que se acerca la Navidad cuando el aire huele a limpio y lo notas entrar por la nariz, frío. Cuando mis manos huelen a naranjas del país y a mandarinas y en la calle huele a castañas asadas. De niña, la Navidad en casa empezaba en Noviembre, cuando mi madre, los fines de semana, prepara sus licores y, cuando el piso de la cocina se cubría de harina y nos reuníamos todos, a amasar, a hablar, a reír y a disfrutar. Si se nos hacía poco, siempre podíamos subir a casa de Paula, nuestra vecina y seguir con la fiesta del amasado........
Ahora yo he cogido el “testigo” y es mi casa la que huele a dulces y soy yo la que prepara los licores. Entre naranjas, mandarinas y castañas, preparo galletas de jengibre, mis favoritas y preparo los dulces para los días de fiesta. Me gusta recibir a mi familia en casa y pasar estos días en la tranquilidad de mi hogar.
La receta de las truchas como la de los rosquetes me trae los recuerdos de los que ya no están y de los que sí están.... pero sobre todo me acuerdo de Lázaro. Era como un segundo padre para mí, el marido de Paula, de quién hablo en la carta. Estas truchas las preparé por la noche cuando todos dormían y entonces recordé la algarabía de nuestra casa y de la casa de nuestros vecinos cuando era niña. Cuando nosotros terminabas ellos empezaban y la "fiesta" seguía hasta la madrugada.
Creo, sin dudarlo, que él era la persona a la que más le ha gustado la Navidad de todas las que he conocido, su portal era el más grande y en su casa los regalos llenaban los sofás......... Recuerdo ver su cara al entregar un regalo, expectante y luego su sonrisa orgullosa al ver que había acertado.
Hace algo menos de dos meses que nos dejó y éste día de Reyes que está por venir, no subiremos a su casa temprano para entregarle su regalo antes que sus hijos vinieran para que pudiera enseñar el "artilugio" del año, cualquier cosa que cantara o bailara (ranas, flores, peces, monos, loros)
Estas truchas van por tí.......
Antes de poner la receta, tengo que decir que las truchas tradicionalmente son fritas y se realizan con una masa de hojaldre, pero a mí me gusta más esta versión con la masa con la que hago las empanadas de "pino" al horno.
Masa
1 kg de harina
2 sobres de levadura (Royal)
2 huevos
150 de manteca de cerdo ibérico
250ml de agua hirviendo con una cucharadita de sal
Mezclar la harina con la levadura, añadir los huevos y la mantenca derretida. Amasar hasta integrar bien todos los ingredientes. Agregar el agua con la sal y amasar hasta que la masa se vea lisa y brillante y no se pegue a las manos. Formar una bola y dejar reposar media hora.
Relleno
1500 grs de batata blanca
200ml de agua
200ml de azúcar
2 cuaharadas de Anís
300 grs de pasas sultanas
200 grs de almendras crudas picadas finas
Guisar la batata y hacerla puré. Hacer un almíbar con el agua y el azúcar y mezclar con el puré de batata sin retirar del fuego hasta que adquiera una consistencia de una crema espesa.
Poner de remojo las pasas con el anís. Añadir las almendras y las pasas a la crema de batatay dejar enfriar.
Estirar la masa y cortar círculos del tamaño que queramos las truchas, poner el relleno y cerrar, pintando el borde interior con agua. Llevar al horno a 160ºC y cuando estén un poco doradas pintar con anís y volver a meter en el horno, hasta que estén bien doradas.
Vaya, hermana...las truchas están riquísimas, como todo lo que haces y menos mal que el "testigo" lo heredaste tú.
ResponderEliminarYo también me acuerdo mucho de Lázaro, de "nuestro padre-abuelo-vecino-amigo". Es inevitable no hacerlo y más en este tiempo, en su "fiesta grande".
Por diversos motivos, las navidades dejaron de tener para mí esa chispa mágica y que nada tiene que ver con haber descubierto que los Reyes son los papás.
La falta de Lázaro ha venido a sumarse a mi lista particular y no podré cumplir la promesa que me hizo formular, hoy, mi amiga Patricia: "Pásalo bien, María, pero, sobre todo, no llores". Ya lo he hecho, leyéndote, recordando esas noches de amasado de rosquetes y truchas, de portales gigantes y regalos "increíbles" de nuestro Lázaro.
Aún así, ya es Navidad y en tu casa hay dos pares de ojitos nuevos, despiertos, atentos, sorprendidos y dejándose impregnar por los aromas de tu cocina, por el ambiente festivo, por el sabor navideño.
¿A qué hora estoy en tu casa?, jeje.
Feliz Navidad, hermana
Uyyyyyyyyyyyyssssss hermana, salió el anterior mensaje con el "nombrete" de tu sobrino..no me di cuenta de cerrar su sesión.
ResponderEliminar¿Ves? eso pasa por tener "niños" en casa, jajaja
Pues creo que a partir de ahora vamos a tener que dejar un hueco en estas fechas para limpiar nuestros ojos.......porque es lo que tiene hacerse mayor.
ResponderEliminarTe juro que eran casi las dos de la madrugada y yo llorando y estirando la masa de las truchas y es que me parece mentira que ya no esté y sobre todo porque me recuerda que en cualquier momento puede ser uno de los viejos nuestros...
Bueno al día siguiente mamá llegó el momento de hacer los rosquetes y por lo menos no estuve sola.......
Besos